Te suena familiar el dilema sobre ¿qué fue primero, el huevo o la gallina? El mismo dilema lo podemos encontrar al hablar de obesidad y resistencia a la insulina, en donde ésta última es un claro signo clínico de la Diabetes Mellitus.
El Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) relaciona la resistencia a la insulina como un factor clave para presentar Diabetes Mellitus Tipo 2. La insulina, es una hormona vital que se encarga de regular los niveles de la glucosa (azúcar) en la sangre del cuerpo mediante los siguientes mecanismos:
- Los alimentos que consumimos se transforman en glucosa. Por ejemplo, una pieza de manzana cuenta con aproximadamente 15 gramos de carbohidratos que, al metabolizarse se convertirán en glucosa en nuestro cuerpo.
- Cuando la glucosa pasa a nuestro torrente sanguíneo proveniente del sistema digestivo, el páncreas (que es una glándula) secreta insulina.
- La insulina facilita la entrada de la glucosa en las células del cuerpo para ser usada como energía.
- La insulina también envía señales al hígado para que éste almacene glucosa en forma de glucógeno. El glucógeno, es la manera en que nuestro cuerpo guarda reservas de energía en nuestro hígado y músculos.
- Cuando la glucosa entra a las células apoyada por la insulina, los niveles de glucosa circulante en la sangre disminuyen.
- Cuando los niveles de glucosa sanguínea son bajos (<70mg/dL), se manda una señal al hígado para que éste libere la glucosa que almacenó en forma de glucógeno y así llevar la glucosa sanguínea a los niveles considerados saludables (entre 70 y 100mg/dL).
Lo anterior es sinónimo de un correcto funcionamiento en nuestro organismo. Pero cuando falla la secreción de insulina por parte del páncreas o la asimilación de glucosa en las células, ocurre lo siguiente:
- Hiperglucemia, que se define como niveles de glucosa en sangre elevados (>100mg/dL en ayuno).
- Debido a la hiperglucemia el páncreas responde secretando más insulina, para favorecer la asimilación de glucosa por parte de las células.
- Conforme pasa el tiempo y se mantienen la hiperglucemia, las células dejan de responder a los niveles elevados de insulina (hiperinsulinemia), dando lugar a signos de resistencia a la insulina.
- Según los lineamientos de la Asociación Americana de Diabetes (ADA, por sus siglas en inglés) niveles >126mg/dL de glucemia en ayuno es un claro diagnóstico de Diabetes Mellitus.
La mejor manera de prevenir y tratar este proceso patológico es manteniendo estilos de vida saludables, tanto una dieta correcta que debe ser; completa, equilibrada, inocua, variada, adecuada y suficiente. Así como actividad física, un mínimo de 30 minutos 5 días por semana.
Si presentas síntomas como subir de peso a expensas de tejido adiposo con facilidad, exceso de sed durante el día, antojo de comer constantemente y en exceso, y además la necesidad de orinar constantemente, visita a tu médico, ella o él podrán asesorarte en el diagnóstico y el mejor tratamiento para prevenir o tratar la resistencia a la insulina.
Por Alberto Molás, Miembro del Consejo Consultor de Nutriólogos de Herbalife Nutrition