¿Te imaginas un tren de alta velocidad que llega casi siempre a tiempo, que rara vez cancela y que transporta a millones de personas sin contratiempos? Suena como un sueño, ¿verdad? Pues Renfe, la compañía española que bien conocemos, lo está haciendo realidad, pero no exactamente donde esperarías. Mientras en España hemos lidiado con retrasos y cambios en las políticas de compensación que nos dejan pensando, al otro lado del charco, en Arabia Saudí, Renfe presume de una puntualidad que parece de otro mundo. Hablemos del milagro del tren Haramain.
El Haramain High-Speed Railway es una joya de la ingeniería y la operación ferroviaria que conecta las ciudades santas de La Meca y Medina, un trayecto de 453 kilómetros con paradas en Jeddah y el aeropuerto internacional. Desde su inauguración en octubre de 2018, este servicio ha movilizado a más de 29.2 millones de pasajeros, experimentando un crecimiento interanual del 20%. Lo más impresionante es su desempeño: Renfe, que lidera el consorcio encargado de la operación completa (desde la conducción hasta la venta de boletos), reporta una puntualidad superior al 96%, incluso midiendo con un margen de solo cinco minutos de retraso. Y, como si eso no fuera suficiente, ¡han logrado operar 70,000 servicios consecutivos sin una sola cancelación! Álvaro Fernández Heredia, presidente de Renfe, no dudó en calificarlo como ‘uno de los proyectos más exitosos del mundo’ durante el Saudi International Rail en Riad. Incluso durante la exigente temporada de Ramadán, el servicio superó las expectativas, transportando a 1.35 millones de peregrinos con una puntualidad media del 98.5% y sin incidentes.
Ahora, demos un brinco de regreso a casa para entender el contraste. Los usuarios del AVE en España, especialmente durante el verano pasado, vivimos una temporada de retrasos considerables. Según informes, cuatro de cada diez trenes de alta velocidad llegaron tarde, afectando a unos 2.5 millones de pasajeros entre junio y agosto. Y por si la espera no fuera suficiente, las condiciones para reclamar compensación se endurecieron en julio de 2024. Antes, con 15 minutos de demora ya podías aspirar a una parte del boleto; ahora, necesitas que el retraso sea de al menos una hora para recibir el 50%. El ministro Óscar Puente incluso reconoció en septiembre que las incidencias en el sistema podrían extenderse ‘al menos dos años más’. Definitivamente, las cifras y la experiencia del pasajero son muy distintas en ambos escenarios.
Renfe no solo celebra sus éxitos en Arabia Saudí, sino que también refuerza su compromiso con la ambiciosa Visión 2030 del país, la cual incluye planes para nuevas líneas ferroviarias de alta velocidad, como la que unirá Riad y Qiddiya. Esto demuestra una clara apuesta por expandir su presencia y experiencia operativa fuera de España. Este caso nos invita a reflexionar: ¿qué factores hacen que una misma compañía pueda alcanzar niveles de excelencia tan dispares en diferentes contextos? Es probable que entren en juego la infraestructura, la inversión, las prioridades operativas y hasta la cultura de servicio. El éxito en Arabia Saudí es un testimonio del potencial de Renfe y de la capacidad de la tecnología ferroviaria de transformar la movilidad, siempre y cuando las condiciones sean las adecuadas. Quizás sirva de inspiración para futuras mejoras en casa, demostrando que la alta puntualidad no es una fantasía, sino una meta alcanzable.

