En un giro interesante de los hábitos de consumo, los estadounidenses están mostrando una clara preferencia por los viajes en coches autónomos, incluso cuando esto significa pagar un precio más alto. Según datos recientes, los servicios de robotaxis de Waymo están cobrando en promedio 20.43 dólares por trayecto, un monto significativamente mayor al de sus competidores como Lyft y Uber. Pero, ¿qué es lo que está impulsando esta tendencia? La respuesta parece estar en la valoración que los usuarios hacen de la privacidad y comodidad que ofrece un viaje sin conductor.
Los datos, recopilados a través de casi 90,000 viajes reales en San Francisco, revelan que Waymo puede llegar a cobrar hasta 11 dólares más que sus competidores durante las horas pico. A pesar de esto, la demanda por sus servicios no hace más que crecer, con la compañía realizando ya 250,000 viajes de pago a la semana en las ciudades donde opera. Este fenómeno sugiere que para muchos usuarios, la experiencia de viajar en un vehículo autónomo, donde pueden disfrutar de su ‘burbuja personal’ sin interacciones humanas no deseadas, vale ese costo adicional.
Además de la comodidad, la seguridad sigue siendo una prioridad para los usuarios. Aunque el 74% de los encuestados expresó preocupaciones al respecto, la mayoría también reconoce los avances en supervisión remota y tecnología de seguridad que Waymo y otras compañías están implementando. Con planes de expansión acelerados, incluyendo nuevas ciudades en EE. UU. y futuras incursiones en Europa, Waymo está demostrando que el futuro del transporte podría ser más autónomo de lo que muchos anticipaban. Este movimiento no solo refleja un cambio en las preferencias de los consumidores, sino también un paso significativo hacia la adopción masiva de tecnologías de conducción autónoma.