Si eres de esas personas que todavía disfruta de su Samsung Galaxy Watch con el sistema operativo Tizen, es momento de prestar atención a lo que viene. La tecnología avanza a pasos agigantados y, a veces, nuestros dispositivos favoritos deben adaptarse a los nuevos tiempos. Según reporta 9to5Google, Samsung está tomando medidas significativas que afectarán directamente el funcionamiento de estos relojes inteligentes, marcando un punto de inflexión en la evolución de su ecosistema wearable.
A partir del próximo 30 de septiembre, Samsung desactivará permanentemente la posibilidad de descargar aplicaciones y esferas personalizadas en los Galaxy Watch que funcionan con Tizen. Esto significa que, aunque tu reloj seguirá funcionando para las tareas básicas, perderás la capacidad de instalar nuevo software o reinstalar aplicaciones que hayas eliminado previamente. Es importante destacar que esta no es una medida sorpresiva, sino parte de una transición gradual que comenzó en 2021 cuando Samsung decidió migrar definitivamente hacia Wear OS de Google. El año pasado ya se habían eliminado las opciones de pago, y ahora llega el paso final que consolida el cambio de plataforma.
Tizen fue la apuesta original de Samsung para sus primeros Galaxy Watch, debutando en 2018 y alimentando modelos como el Watch Active, Active2 y Watch 3 hasta 2020. Aunque en su momento fue una plataforma sólida, las capacidades de Wear OS, basado en Android, han superado ampliamente lo que Tizen puede ofrecer hoy en día. La última gran actualización significativa para Tizen llegó a finales de 2021 con la incorporación de la detección de caídas, pero desde entonces el enfoque de desarrollo se ha centrado exclusivamente en Wear OS con la capa de personalización One UI.
Este cambio nos hace reflexionar sobre la naturaleza efímera de la tecnología y la importancia de mantenerse actualizado en un mundo digital en constante evolución. Mientras algunos usuarios podrán seguir usando sus Galaxy Watch con Tizen para funciones básicas, aquellos que valoran la personalización y la expansión de capacidades deberán considerar la migración hacia dispositivos más modernos. Al final, se trata de encontrar el equilibrio entre el apego a nuestros gadgets y la adaptación a las nuevas oportunidades que ofrece la innovación tecnológica.