Cuando estamos viviendo en medio de una crisis económica o social, en repetidas ocasiones escuchamos consejos de quienes han vivido situaciones similares en sus negocios, empresas o experiencias personales; hay quienes te aconsejan en esos momentos de crisis capitalizar las oportunidades invirtiendo en los negocios, ya sea en herramientas, inmuebles o infraestructura, por otra parte hay quienes recomiendan ahorrar, reducir gastos y tratar de mantener esta disciplina en gasto hasta que mejoren las condiciones económicas y sociales.
En ambos casos, son válidas las recomendaciones, es decir, aunque están en polos opuestos, tienen por objetivo el mantener y eficientar la operación de los negocios en tiempos complejos, ante esta disyuntiva, lo que debemos considerar, es la opción que pueda no sólo mantener operativamente a la empresa, sino la opción que pueda mejorar la capacidad y calidad de respuesta ante los clientes, ya que en época de vacas flacas la satisfacción del cliente debe procurarse aún más.
Para lograr este objetivo, se deben conocer los procesos que rigen a la compañía, y analizar la forma en que el aprendizaje y la experiencia adquirida jueguen a favor de las empresas, para que puedan parametrizar y medir los tiempos, respuestas y actividades. La mejor forma de lograrlo, es a través del uso de herramientas tecnológicas que agilicen la interacción de equipos de soporte técnico con otros departamentos o solicitudes de clientes hacia una mesa de servicio.
Hoy se pueden procesar de forma realmente eficiente miles de solicitudes, con las herramientas adecuadas, podemos analizar el comportamiento y necesidades de nuestras empresas de forma cuantitativa y con esta información mejorar sustancialmente los tiempos de respuesta y la atención final a nuestros usuarios o clientes, trasladando estas prácticas en tiempos de crisis, pueden ayudar a mantener a las organizaciones.
Si ya cuentan con una herramienta que les brinde esta información y que les permita diseñar un plan de mantenimiento y crecimiento en tiempos de pandemia, significa que van en el camino a sobrevivir la crisis. Pero si no cuentan con las herramientas, ni la información para tomar este tipo de decisiones, es tiempo de invertir en ellas, al finalizar la etapa de crisis, esta inversión habrá ayudado a mantener o mejorar la satisfacción del usuario o cliente, y evitando en gran medida su partida.
Hay muchos casos de éxito, donde implementando mesas de servicio como InvGate Service Desk, han modificado por completo la forma en que daban seguimiento y atención a sus clientes y usuarios, casos que van desde la industria de servicios, restaurantes, universidades, bancos, embajadas y todo aquel negocio que signifiquen solicitudes y atención a través de emisión de tickets.
Adicionalmente, en los lugares donde ya tienen funcionando durante mayor tiempo a InvGate Service Desk, o InvGate Assets han tenido sustanciales ahorros que les han permitido salir mejor librados, que otros competidores en el mercado durante la pandemia.
Mi sugerencia es: inviertan y ahorren tomando decisiones que signifiquen un mejor y mayor control de sus procesos, al final de cuentas el beneficio final lo verán los dueños de los negocios y verán mejor atendidas sus peticiones los clientes.